MAS DE TORRENT: Cuando la calma y la excelencia se convierte en Lujo.

No es un hotel al uso, es mucho más, pero me di cuenta sólo al estar allí. No es la Toscana, es la costa Brava en plena Empordá. Una Masía catalana del siglo XVIII, con grandes anfitriones, que harán que quieras volver una y otra vez…

Vaya ¡Si lo llego a saber, vengo antes!

Sinceramente había oído hablar mucho de Mas de Torrent así que tenía ganas de visitarlo.

Mis expectativas eran tan altas que pensaba no iban a ser superadas, obviamente es lo que suele pasar cuando idealizas cualquier cosa en este mundo terrenal. Pero en este caso no fue así, las superó con creces y por motivos más que justificados que dan lugar a disfrutar de este espacio secreto…

Empecemos por el punto de partida, el trayecto hasta llegar a él atraviesa un paisaje verde y frondoso que no esperaba, atravesamos pueblos pequeños como Pals que valen bien una buena visita por muchos y diversos motivos. ¡Ay que viaje!

Y llegamos finalmente. Llamamos al timbre de la propiedad como si se tratara de un amigo al que vamos a visitar, y una vez nos abren la verja comienza el espectáculo visual. A la derecha nada más avanzar veo el helipuerto, pero lejos de dejarme vislumbrar por él, lo que me llama la atención es ¡un precioso huerto! Esto promete, me encanta el tema de degustar alimentos de proximidad.

Los jardines muy cuidados y apacibles me parecen una preciosidad más del propio del lugar.

La entrada son amplias puertas acristaladas y es cuando tomas consciencia de que entras en una masía reconvertida en hotel, pero es extraño…no tengo esa sensación de estar en un hotel y gran culpa de ello la tiene el personal agradable que te acoge como si de un amigo se tratara.

Curiosidad profesional seguro, pero me pongo a escrudiñar cada rinconcito que veo; al lado izquierdo un precioso salón con unas vistas de lo más relajantes, al lado derecho, la entrada al restaurante y un Bar de lo más “cool” como dicen mis compañeros anglosajones. E incluso una bodega con más de 700 referencias que harán las delicias de los maridajes más completos en cualquiera de las experiencias gastronómicas.

Por todos es conocido, y si no os lo cuento yo, que el Chef Ramón Freixá dirige la cocina del restaurante, así que nada puede fallar.

Para ser honesta ya había probado su cocina antes y soy muy fan. Es uno de esos placeres que nos ofrece la vida y que no debes dejar pasar de largo: cocina exquisita, sabrosa y honesta sin más, pero con todo el glamour.

Las mesas elegantemente vestidas, así como bien armonizadas con los binomios de bonitas vajillas y cristalerías, son un complemento primordial. Me encanta y no solo a mí…mi compañera Madison y yo disfrutamos de cada vajilla elegantemente decorada en las comidas y cenas. ¡Un alarde de buen gusto!

El día de nuestra llegada llovía, y así siguió mientras comíamos. Gratificante experiencia ver como las gotas de lluvia se aferraban al cristal a modo de saludo de bienvenida mientras los sabores revoloteaban en nuestro paladar.

Voy a mencionar algo del entorno que me sorprendió para bien, las múltiples opciones que el hotel nos propone para recorrer la zona.

Desde bicicletas eléctricas donde deleitarse con las vistas de arrozales hasta llegar a la costa, pasando por visitas a galerías de arte que se agazapan como pequeños tesoros escondidos por la zona.

Si lo que prefieres es relajación y reconectar contigo mismo o simplemente tener un rato para ti, aprovecha el MasSpa, con el plus de sus clases de yoga, como aliciente. Es íntimo, personal y acogedor. Incluso su piscina, de dimensiones adecuadas, es una auténtica maravilla.

Para lo que somos amantes de los animales además os diré: ¡que las mascotas son bienvenidas!

Mi estancia no pudo ser más placentera y por ello os ánimo a todos aquellos que queráis desconectar, en estos tiempos complicados, viajar y disfrutar de este hermoso entorno.

Apostillo como reseña final que tienen una Suite en plena naturaleza para el deleite de los que buscan tranquilidad, una habitación eco-sostenible en la que todo está creado con materiales 100% naturales , ecológicos y sostenibles, desde los muebles de madera trabajados a mano, al colchón Sleep Green.

Mención aparte su gran Guest Experience Manager José Manuel, el perfecto anfitrión, que hará que vuestra estancia sea más confortable aún, si cabe.

Os debo recomendar que si queréis disfrutar de un lugar maravillosamente sencillo donde las sensaciones, la calma y los momentos compartidos te inviten a hacerlos imborrables...este es Mas de Torrent.

Mas de Torrent pertenece a Relais Chateaux y Único hoteles.

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